Aplicaciones de neurociencia para el sector de la arquitectura

¿Qué transmite el diseño de un edificio?

El papel de la neurociencia en la arquitectura es un concepto contemporáneo e innovador que asocia el aval científico y la investigación al diseño arquitectónico de edificios.

Ayuda a los arquitectos a comprender cómo el cerebro está sintonizado con el entorno.

Detrás siempre hay un propósito con respecto a la arquitectura y el diseño, y es crear edificios, espacios y ciudades que mejoren la vida de las personas.

Arquitectura y neurociencia, una simbiosis perfecta para entender todo esto mediante técnicas de neuroimagen.

Empezamos.

Pon la ciencia al servicio de tus proyectos de arquitectura

Cada vez más empresas buscan alternativas y formas de transformar. El futuro ya está aquí, y los proyectos pretenden dialogar con el espacio para responder a las necesidades funcionales de sus ocupantes, transmitir determinados atributos o valores y construir atmósferas idóneas.

La neurociencia en el campo de la arquitectura permite conocer la actividad cerebral asociada a aspectos específicos de un edificio o guiar el proceso de diseño arquitectónico.

 

El reconocimiento de esta idea crece entre los arquitectos.

Alíate con la ciencia para dejar tu propia huella.

Ahora puedes testar qué transmite tanto el exterior como el interior de un edificio mediante validación científica.

  • Analiza las respuestas del cerebro y las diferentes alternativas durante el proceso de diseño
  • Conoce qué atributos semánticos transmite cada una de estas alternativas
  • Identifica si esos atributos están alineados con lo que quiere transmitir la empresa

 

Los resultados son igual de brillantes en proyectos de decoración o en diseño de espacios interiores.

 

Básate en hechos y no en intuiciones

Hay respuestas que únicamente están en el inconsciente.

La magnetoencefalografía (MEG) es una técnica de neuroimagen funcional que describe los patrones espacio-temporales de la actividad cerebral relacionada con diferentes procesos cognitivos básicos y mide los cambios en los campos magnéticos inducidos por la actividad neuronal.

Fernando Maestú como director de uno de los equipos de investigación más avanzados del mundo, el Laboratorio de Neurociencia Cognitiva y Computacional, perteneciente al Centro de Tecnología Biomédica – CTB de la Universidad Politécnica de Madrid, te cuenta mucho más sobre esta tecnología.

 

 

La MEG, que es la única técnica de neuroimagen funcional completamente no invasiva, puede medir la actividad cerebral en milisegundos (medida directa), y presenta una resolución espacial en milímetros, permitiendo seguir en tiempo real la velocidad de procesamiento que utiliza el cerebro para comunicar información.

Un cambio de perspectiva puede hacer una gran diferencia e impulsar la obtención de resultados.

¿Estás listo para aplicar la ciencia directamente en tus procesos de diseño?

Empieza a tomar decisiones estratégicas