El poder de los impulsos sensoriales no es una sorpresa para nadie.

En los últimos años, muchas empresas y marcas han evolucionado su desarrollo de productos y acciones publicitarias desde una perspectiva basada exclusivamente en atributos visuales, a un enfoque mucho más amplio en el que se presta atención a otros aspectos sensoriales, aplicando nuevos enfoques que potencian la experiencia de compra de los consumidores.

Comprender el impacto que determinados estímulos ejercen sobre los sentidos (vista, oído, olfato, gusto y tacto) y la percepción de los consumidores, ayuda en el perfeccionamiento del desarollo previo al lanzamiento, la efectividad de las creatividades publicitarias y la optimización de los procesos de compra.

Aunque aún hay mucho camino por recorrer, hay cosas que están cambiando.

Los consumidores buscan experiencias multisensoriales.

Las marcas que son más creativas ante las diversas percepciones sensoriales, son capaces de generar vínculos relevantes con sus clientes mediante experiencias únicas y alineadas con lo que se espera de ellas.

El marketing sensorial tiene un claro objetivo: enamorar y enganchar a los clientes a través de los sentidos. Para ello trata de crear vivencias, invita a oler, ver, saborear, sentir, escuchar. En definitiva, emocionar al consumidor generando experiencias de 360 grados.

En el momento de selección y compra de un producto, ¿solo te importa el precio o hay algo más que te empuje a realizar dicha acción? Está demostrado que el cuerpo humano es capaz de recordar el 1% de lo que toca, el 2% de lo que escucha, el 5% de lo que ve, el 15% de lo que degusta y un 35% de lo que huele, lo que demuestra que todos los sentidos juegan un papel decisivo en el proceso de decisión de compra.

Esta información se podría aprovechar para conseguir mejor posicionamiento de una determinada marca o producto en la mente del consumidor, creando momentos especiales y logrando generar emociones. De hecho, en el momento que el cliente recibe información mediante los cinco sentidos, la marca se mantiene durante más tiempo en su top of mind.

Gracias al análisis de la respuesta cerebral ante diferentes estímulos (i.e. productos, creatividades) es posible comprender a través de la información del cerebro, cuáles son las preferencias implícitas o inconscientes de los clientes en el proceso de compra.

En entornos muy competitivos, ahora puedes marcar la diferencia en la manera de promover las ventas a partir de una rigurosa evaluación de los procesos de desarrollo o lanzamiento de productos.

¿Imaginas el ahorro en lanzamientos fallidos?

Dispara las opciones de mostrarte valioso

Ahora puedes entender cómo tus clientes perciben tu marca y de qué forma puedes distinguirte de la competencia para impactar en las ventas.

Conocer cómo reacciona nuestro cerebro ante diferentes estímulos sensoriales es posible utilizando tecnologías de neuroimagen funcional, y más concretamente a través de la Magnetoencefalografía (MEG). Esta herramienta permite evaluar con una precisión de milisegundos la actividad cerebral de tus consumidores potenciales cuando están expuestos a experiencias multisensoriales con tu marca.

Elegir qué versión creativa es la más apropiada para evolucionar el diseño de tu marca, probar distintas alternativas publicitarias, testar nombres, sabores, colores o tacto de un determinado producto son algunas de las aplicaciones funcionales de esta tecnología, comprobando que tu inversión realmente provoca el tipo de respuesta que esperas de tus clientes.

Impulsa tu negocio con todo el rigor que la innovación científica pone al servicio de tu empresa y elige la mejor versión de tus diseños en todos los sentidos.